05 Jun
2024
Los pueblos de Ibiza que no te debes perder
Sabemos que en verano la playa resulta muy tentadora, pero también que sería una pena que regresaras de tus vacaciones sin haber visto los pueblos de Ibiza más bonitos y los rincones que les hacen singulares. Además, mientra descubres por qué también la llaman la Isla Blanca, podrás comprar en mercadillos y tiendas boutique, seguir las huellas de los antiguos hippies y visitar coquetos rincones y fotogénicas iglesias. Que no te de pereza saltar de la hamaca: let’s the road!
Recorrer Ibiza de pueblo en pueblo te proporcionará la oportunidad de adentrarte en la cara más rural, calmada y auténtica de la isla. Al salir de las vías principales y tomar las carreteras secundarias en busca de los pequeños asentamientos que salpican el interior, descubrirás por el camino las típicas casas de campo de Ibiza, con su singular arquitectura, así como su paisaje agrícola tradicional de campos de cultivo salpicados de almendros, olivos, algarrobos e higueras. Sin olvidar los densos bosques de pinos que colorean de verde los montes y colinas de la isla.
¿Por qué los pueblos de Ibiza son bonitos?
Santa Gertrudis, Ibiza
Una de las singularidades de la isla radica en que, hasta mediados del siglo pasado, la mayoría de los pueblos de Ibiza estaban formados tan sólo por una iglesia, una tienda que también hacía las veces de bar y oficina de correos, y unas pocas viviendas en torno a este enclave. Sus habitantes vivían dispersos por el territorio, en fincas autosuficientes que trabajaban hasta la llegada del domingo, cuando se reencontraban en la iglesia y socializaban bajo su porche. Los únicos pueblos que presentaban un mayor desarrollo eran Sant Antoni de Portmany y Santa Eulària des Riu, los cuales acabaron por convertirse en los principales núcleos turísticos de Ibiza.
Ibiza, de pueblo en pueblo
Una excelente manera de visitar en verano los diferentes pueblos y parroquias de Ibiza consiste en incluir dos o tres paradas al ir o regresar de las calas y playas de Ibiza más bonitas, esas que seguro no te querrás perder. Por ejemplo, si vas a las playas del noroeste, visita Santa Agnès, Sant Mateu y Sant Miquel. Si vas a las del noreste, párate en Sant Llorenç de Balàfia, Sant Joan y Sant Vicent. Cuando te dirijas a las playas y mercadillos hippies del este, incluye Sant Rafel, Santa Gertrudis, Santa Eulària y Sant Carles. El día que quieras tumbarte en Cala d´Hort o Ses Salines, dos de las playas más famosas de Ibiza, podrás descubrir Sant Jordi y Es Cubells. Y cuando te dirijas a las calas imprescindibles del oeste de Ibiza, podrás aprovechar para descubrir Sant Josep, Sant Agustí y Sant Antoni. Sin olvidar que a poco menos de 3 km de Ibiza, te aguarda el pueblo de Jesús.
¿Por qué llaman Isla Blanca a Ibiza?
El sobrenombre por el que hoy se conoce popularmente a Ibiza nació a principios del siglo XX, tras un viaje que el artista catalán Santiago Rusiñol realizó en agosto del año 1912. Tras su viaje, del que quedó muy impresionado, la calificó como “la isla blanca”, aunque no fue hasta los años 40 cuando empezó a usarse como eslogan en las campañas de promoción turística. La blancura que destacó Rusiñol procede de su arquitectura tradicional, que tanto en las casas de campo como en los pequeños pueblos e iglesias de Ibiza se traduce en muros blanqueados con cal y edificaciones con pocas y discretas ventanas.
¿Cuáles son los pueblos más auténticos de Ibiza?
Sant Miquel de Balansat, Ibiza
En total, Ibiza tiene 15 pueblos en su territorio, algunos de los cuales se mantienen prácticamente igual que hace un siglo. Si quieres conocer cómo eran los pueblos de la isla de antaño, has de incluir en tu ruta de los pueblos de Ibiza las siguientes paradas, donde también podrás degustar cocina típica e ir de compras:
Santa Agnès de Corona
Se encuentra a menos de 15 kilómetros de Amàre Beach Hotel Ibiza, en un bonito valle punteado de almendros. Su iglesia cuenta con dos puertas de acceso, lo que llama la atención por el pequeño tamaño del templo. ¿La razón?: en 1870 sucedió un crimen junto a la puerta principal de entonces, que es la situada bajo los porches, y los feligreses se negaron a hacer uso de ese acceso, por lo que se abrió la puerta que mira hacia la carretera.
Dónde comer: prueba la famosa tortilla de vegetales de Can Cosmi.
Qué ver: el valle, punteado de almendros y con algunos ejemplos de casa tradicional típica.
Sant Mateu d’Albarca
El valle vinícola de Sant Mateu alberga este pequeñísimo núcleo formado por la iglesia, dos viviendas y dos restaurantes. Te recomendamos que llegues a él desde la carretera que discurre por detrás de la iglesia de Santa Agnès, la cual te descubre una bonita imagen de la iglesia de Sant Mateu asomando en la distancia.
Dónde comer: en el restaurante Ses Casetes podrás degustar platos ibicencos con vistas a la iglesia.
Qué ver: acércate a la bodega Can Maymó, a 1,5 km de la iglesia.
Sant Mateu d’Albarca
Sant Agustí des Vedrà
Menos de 5 kilómetros separan nuestro hotel de 4 estrellas en Cala de Bou con uno de los pueblos con más encanto de Ibiza, un bonito conjunto arquitectónico situado en lo alto de una colina que cuenta además con dos restaurantes muy especiales: el Can Berri Vell y Bar Can Berri
Qué ver: sus excelentes ejemplos de arquitectura ibicenca tradicional.
Es Cubells
Cuando vayas de ruta por el sur de Ibiza, no olvides desviarte para acercarte a este pequeño pueblo cuya iglesia se asoma a los acantilados de Es Cubells, siendo la única situada al borde del mar (aparte de la Catedral).
Dónde comer: la cocina ibicenca más marinera la encontrarás en Ses Boques, situado junto al mar y al pie de los acantilados.
Qué ver: relájate en su mirador con bonitas vistas a esta parte de la costa sur de Ibiza.
Es Cubells, Ibiza
Sant Vicent de sa Cala
El pueblo más remoto de la isla está formado tan sólo por su iglesia, la casa parroquial y un restaurante situado tras el templo. La carretera que llega hasta este punto recorre la sierra de Mala Costa descubriendo excelentes ejemplos de casas tradicionales.
Dónde comer: en Can Gat, en la playa de Sant Vicent, conocido por la calidad de su pescado y sus especialidades ibicencas.
Qué ver: el yacimiento del santuario púnico de la cueva des Culleram, más por el paseo que por los escasos vestigios que quedan a la vista.
Sant Llorenç de Balàfia
Sant Llorenç de Balàfia
Su sencilla iglesia con un único arco en el pórtico despunta a la vista cuando se llega por la carretera de Santa Gertrudis. A un kilómetro, se encuentra el poblado de Balàfia, un conjunto singular formado por cinco viviendas y dos torres defensivas considerado uno de los mejores ejemplos de arquitectura tradicional de Ibiza.
Dónde comer: en el restaurante Es Pins, situado en la carrterera de Sant Joan, podrás degustar cocina ibicenca, así como uno de los mejores aliolis de la isla.
Qué ver: en el Centro de Interpretación de Es Amunts podrás conocer los valores naturales y etnográficos de este importante Área de Especial Protección, el cual se extiende por los municipios de Sant Joan y Sant Antoni.
Los otros pueblos con encanto de Ibiza
Sant Carles de Peralta, Ibiza
Pero aún hay muchos más pueblos imprescindibles de Ibiza que no te puedes perder y que debes incluir en tus rutas por el norte, el este y el sur de Ibiza.
Santa Gertrudis de Fruitera
Se ha convertido en el pueblo más chic de Ibiza gracias a su ambiente cosmopolita, sus boutiques y sus restaurantes. Después de visitar su iglesia, no dejes de acercarte al mítico Bar Costa, cuyo interior está decorado con decenas de cuadros pintados por artistas hippies que recalaron en Ibiza en los 60 y 70.
Dónde comer: párate al mediodía a probar los famosos bocadillos de jamón del Bar Costa.
Dónde comprar: en su calle peatonal encontrarás coquetas tiendas de moda y decoración. Además, de junio a septiembre se celebra un mercadillo de artesanía los viernes por la tarde noche.
Galerías y museos: en Santa Gertrudis, la galería Parra & Romero Ibiza ofrece exposiciones abiertas al público.
Sant Miquel de Balansat
Su preciosa iglesia fortificada es de obligada visita. Te recomendamos que te acerques los jueves a la tarde, cuando en su patio se celebran representaciones de ball pagès, el baile tradicional de Ibiza. No te vayas sin tomarte una cerveza en Can Xicu, uno de los bares-estanco centenarios de Ibiza.
Dónde comer: para cocina ibicenca de mar, continúa hasta Port des Miquel y pide bullit de peix en Port Balansat.
Qué ver: las vistas desde la torre des Molar (a 6 km) y la cueva kárstica de Can Marça (a 4,5 km), con curiosas formaciones de estalagmitas y estalactitas.
Sant Joan de Labritja, Ibiza
Sant Joan de Labritja
Este encantador pueblo del norte de Ibiza se encuentra de camino a Cala Benirrás, una de las playas más famosas de Ibiza. Si te acercas el domingo a la mañana, en torno a su iglesia y la carretera encontrarás un coqueto mercadillo de artesanía y productos ecológicos.
Dónde comer: si quieres comer en un sitio típico de Sant Joan, acércate a Vista Alegre.
Qué ver: descubre en una ruta de senderismo el paisaje costero que lleva a la Punta des Moscarter y el faro de Portinatx, el más alto de Islas Baleares.
Sant Carles de Peralta
Visita imprescindible gracias al mercadillo hippy de Las Dalias que se celebra a las afueras del pueblo y al bar Casa Anita, situado frente a la iglesia, uno de los enclaves de la Ibiza hippy que aún se conservan (fíjate en los buzones y en su antigua cabina de teléfonos)
Dónde comer: disfruta de arroces, bullit de peix y otros platos ibicencos en Can Pou des Lleó, situado a 5 km del pueblo.
Dónde comprar: en el mercadillo de Las Dalias, una de las visitas imprescindibles en Ibiza.
Qué ver: visita el Museo Trull de Ca n’Andreu, excepcional ejemplo de vivienda rural tradicional de Ibiza que conserva, entre otros elementos, una almazara del siglo XVIII.
Santa Eulària des Riu, Ibiza
Santa Eulària des Riu
Es sin duda uno de los pueblos de Ibiza que no te puedes perder, ya que en él se encuentra el Puig de Missa, un excelente ejemplo de iglesia fortificada de Ibiza. Las casas que se arremolinan en torno al templo constituyen el conjunto histórico del pueblo. Merece la pena que visites Santa Eulària sin prisas: podrás bañarte en sus dos playas principales, visitar museos y galerías, ir de compras y tomar un café en el paseo marítimo.
Dónde comer: en Ca na Ribes, toda una institución de la cocina ibicenca.
Dónde comprar: durante el verano, encontrarás en el passeig de s’Alamera un mercadillo hippy (todos los días, salvo miércoles y domingo)
Qué ver: el paseo que conduce desde el Puig de Missa hasta la desembocadura del río.
Galerías y museos: no te pierdas el Museo Etnográfico de Ibiza, un excelente ejemplo de vivienda tradicional ibicenca. Otras visitas interesantes son la Sala Barrau y el Centro de Interpretación del Río Can Planetes .
Sant Rafel de sa Creu
Sant Rafel de sa Creu
Situado a 8 kilómetros, este pueblo de Ibiza es el único de la isla declarado como Zona de Interés Artesanal debido a su tradición cerámica. Acércate a su iglesia para ver su característico campanario curvilíneo y observar una excelente panorámica sobre la capital de la isla.
Dónde comer: en Can Pilot encontrarás uno de los restaurantes de carne preferidos por los lugareños.
Dónde comprar: encontrarás cerámica en Can Kinoto y otros productos tradicionales en el Mercado de Artesanía de Sant Rafel (jueves, de julio a septiembre).
Qué ver: A menos de 3 km sorpréndete con el piano vegetal de Bibo Park Ibiza Botánico Biotecnológico.
Sant Josep de sa Talaia, Sant Rafel de sa Creu, Jesús y Sant Jordi de Ses Salines
Durante tus paseos por la isla, no pierdas ocasión en acercarte a las iglesias de estos pueblos. En Jesús encontrarás un retablo gótico que pasa por ser la obra de arte más valiosa de la isla, y en Sant Jordi, el único templo de Ibiza que conserva sus almenas.
Jesús
En el interior de la iglesia de este pueblo situado a escasos kilómetros de la ciudad de Ibiza se encuentra el retablo gótico de la Mare de Deu, la obra de arte más valiosa de la isla: de estilo gótico tardío, está compuesto por 25 tablas y fue pintado en el taller de los artistas valencianos Rodrigo y Francisco Osona.
Dónde comer: en Bon Lloc, justo frente a la iglesia, encontrarás platos típicos de Ibiza.
Qué ver: acércate a Cap Martinet y date un paseo con vistas a la costa.
Sant Jordi de Ses Salines
Sant Jordi de Ses Salines
Situado en las proximidades del aeropuerto, de playa d’en Bossa y de la playa de Ses Salines, este pueblo de marcado ambiente local alberga el único templo de Ibiza que conserva sus almenas.
Dónde comer: la carta del restaurante S’Espardell, en playa d’en Bossa, incluye especialidades ibicencas, como el bullit de peix y el calamar con sobrasada.
Dónde comprar: si te gustan los mercados de pulgas, no te pierdas el rastro de segunda mano que se celebra los sábados por la mañana en el recinto del antiguo hipódromo.
Qué ver: visita el Centro de Interpretación del Parque Natural de Ses Salines y conoce el importante valor ecológico de este espacio.
Qué ver en Sant Josep de sa Talaia y Sant Antoni de Portmany
Seguro que durante tus vacaciones en Ibiza tendrás más de una oportunidad de pararte en estos dos pueblos situados a pocos minutos en coche desde Cala de Bou. No te los saltes y disfruta de sus atractivos.
Sant Josep de sa Talaia
Sant Josep de sa Talaia
De tamaño reducido, su núcleo urbano ha crecido en las últimas décadas en torno a su iglesia y la carretera. El templo, como en el resto de pueblos de la Isla Blanca, mantiene las pautas características de la arquitectura popular ibicenca, aunque es la única con un reloj solar en la fachada.
Dónde comer: para cocina tradicional ibicenca, reserva en S’Espartar, situado a menos de 4 km del pueblo.
Dónde comprar: si te gustan los mercados de pulgas, no te pierdas el rastro de segunda mano que se celebra los sábados por la mañana en el recinto del antiguo hipódromo.
A tener en cuenta: el Centro de Cultura Can Jeroni ofrece una completa programación anual de cine y teatro.
Sant Antoni de Portmany
Sant Antoni de Portmany
Localizado a tan sólo 4 km de Cala de Bou, es el núcleo urbano más importante de Ibiza después de la capital y Santa Eulària. De su patrimonio destaca su templo, un excelente ejemplo de iglesia-fortaleza pitiusa que conserva su torre defensiva. Recorre su largo paseo marítimo, que la playa de Es Pouet con Caló des Moro, y siéntate a ver la puesta de sol.
Dónde comer: para una experiencia ibicenca al completo reserva en Es Rebost de Can Prats.
Dónde comprar: encuentra productos gastronómicos típicos de Ibiza en el Cooperativa de Sant Antoni (hierbas ibicencas, almendras, licor de café caleta, chocolate de algarroba, miel, dulces…)
Qué ver: sube caminando hasta la capilla de sa Talaia y disfruta de una panorámica de toda la bahía.
A tener en cuenta: periódicamente se ofrecen exposiciones abiertas al público en la Sala Benjamin Walter (Sa Punta des Molí) y en el antiguo faro de Ses Coves Blanques.
Descubre las mejores calas y playas de Ibiza
Discotecas y bares de Ibiza, nuestra guía nocturna de la isla blanca
Los 10 mejores beach clubs en San Antonio y alrededores
Amàre Beach Hotel Ibiza, a un paso del pueblo de Sant Antoni de Portmany
El pueblo turístico de Sant Antoni se encuentra a menos de 5 kilómetros de Amàre Beach Hotel Ibiza, nuestro hotel de cuatro estrellas recomendado para adultos. Tras un corto paseo en barco, en autobús o en moto podrás conocer su iglesia, una de los mejores ejemplos de iglesia fortaleza de Ibiza; o su bonito paseo marítimo, así como disfrutar de sus terrazas o realizar algunas de los planes que te recomendamos en nuestro artículo 37 cosas que ver y hacer en Ibiza. Y tras la acción, te esperarán nuestras propuestas de gastronomía y bienestar para que despidas el día como te mereces: con lo mejor. Live the mediterranean!
María